
A mis fieles lectores, seguramente este tema, recurrente en mis editoriales y aún más “figurita repetida” en la vida de nosotros los humanos, va a resonar fuerte. Este humilde servidor quiere traer sobre el tapete los famosos cierres donde algunos son expertos en esquivar. Ese momento donde, no sólo el universo, sino toda nuestra realidad nos dice: “Listo, esto no funciona más”. Podemos estar hablando de un trabajo, de una pareja, de un hábito, etc. Somos expertos en “patear” las cosas hacia adelante, muchas veces de procastinar cambios.
Alguien: “Bueno, hoy el Sr. Director vino con todo, acaba de usar LA palabra…”
Esta palabra aplica en todos los órdenes de la vida, desde dejar por la mitad alguna tarea, estudio, trabajo, lo que sea hasta acumular, es decir, procastinar el hecho de confiar y soltar. Este “previsor” Director tiene que hacer una confesión y es que recién ahora está deshaciéndose de elementos de electrónica, cables, conectores y demás chucherías de alguna otra vida pasada en la que fue técnico. ¿Cuesta? Si. Es el famoso síndrome de “por las dudas”; lo guardo porque alguna vez puedo necesitarlo…
Aquí es donde este desapegado Director, sacando a relucir su nuevo adjetivo, ilumina al mero lector con la respuesta que baja desde lo alto como, perdón el ejemplo, un excremento de pájaro en pleno vuelo (perdón por la imagen mental, era necesaria) y afirmo: “No, nunca lo vas a volver a usar/necesitar”. Y si llegara el caso de necesitar algo parecido, pues hay que acercarse a una tienda y adquirir uno nuevo, que funciona bien y no tiene desgaste. Como dice un amigo mío: “Si no lo usaste en 6 meses, no es tuyo, es de MercadoLibre/Amazon”.
En esta cortita pero potente editorial me gustaría llevarlos, no a la reflexión en este caso, sino al cuartito del fondo o a ese último cajón donde guardamos todo lo que “capaz me puede servir en algún momento (es decir nunca)” y bolsa de consorcio en mano comiencen esta bella tarea de limpiar material y energéticamente el lugar que habitan. Es más, tengo entendido que en este momento hay gente muy importante de ANUNCIAR en esos menesteres, a él mi aplauso.
Para cerrar, la única manera que entren cosas nuevas y bonitas es sacando cosas que ya no sirven, son viejas y casi siempre, feas.
Los quiero mucho.

Para ANUNCIAR Informa (AI)
Desde Argentina
Ignacio Bucsinszky
Este artículo esta publicado en el boletín digital, número 66, que corresponde al mes de mayo de 2025.